Románticas, clásicas y con historia, conoce el encanto de las mesas vichy y la historia de este preciosísimo estampado
¿Alguna vichy-lover en la sala? Si hay un clásico inimitable para hacer de las mesas una obra de arte, ese es el vichy. En diversas tonalidades o apostando por el distinguido blanco y negro, este diseño es la cereza del pastel en decoraciones veraniegas. Además, es el estampado predilecto del verano y qué mejor manera de recibir la temporada que haciendo una pedida de mano con el estampado vichy como protagonista de la decoración.
El Vichy es el print que nos lleva a la provenza y a los veranos más resplandecientes en el campo. Este icónico tejido surgió en el pueblo francés de Vichy en el siglo XVII y se usaba, por lo general, en mantelería, ropa de campo, delantales y ropa infantil. Gracias al look de Judy Garland en la película El Mago de Oz (1939) el estampado vichy vio la luz como el nuevo estilo ideal que atavía a diferentes prendas. Sin embargo, en los años 50 el tejido imperó como nunca de la mano de Brigitte Bardot. La actriz francesa —influencer del momento— apostó por un vestido de novia nada tradicional con cuadros vichy en blancos y rosas, para su matrimonio con Jacques Charrier en 1956.
También figuras como Jane Birkin, Audrey Hepburn o Diana de Gales, que pisaron fuerte y se convirtieron en iconos de moda, apostaron por el estampado. Actualmente los cuadros siguen imponiendo un estilo clásico y elegante tanto en prendas de vestir como en la decoración. Las mesas vichy han sido y seguirán siendo la opción más idílica para una celebración veraniega, incluso para un desayuno o un brunch.
Las tonalidades perfectas para un ‘brunch’ estival
Cuando alguien menciona “vichy” lo primero que puede pasar por la mente son los clásicos cuadros en blanco y negro. Pero el estampado tiene mucho que aportar ofreciendo un abanico de colores pasteles infalibles para la primavera y la temporada más cálida del año. Imagina un día radiante con los rayos de sol a todo dar, vestidos blancos ibicencos y mesas con una mantelería peculiar en cuadros vichy rosa.
A la mantelería vichy los colores le sientan estupendamente. El azul que emana frescura en manteles y servilletas; el naranja, que ensalza la calidez de la temporada y combina perfectamente con una propuesta terracota. Un rosa claro primaveral y especial es sinónimo de una mesa vichy perfecta. La mantelería en color rosa conjugada con flores, se convierte en la propuesta más encantadora.
Una combinación muy vichy y fascinante que te encantará
El modelo de un estampado en diferentes colores, en ciertas ocasiones, es difícil de combinar; sin embargo, el vichy es compatible con otras tonalidades. En un post de Julia Berolzheimer hemos visto el juego IDEAL entre diversos tonos del vichy. Las vajillas en amarillo y el mantel en azul producen la conjugación perfecta que te va a enamorar.
No hay duda de que las mesas vichy irradian la puesta en escena de cualquier evento social. Un desayuno inolvidable y el brunch más clásico y cautivador de todos los tiempos. Es la elección más acertada para crear un ambiente único y distinguido. También es la opción más versátil que combina entre sí misma jugando con distintos tonos. Sin duda, un estampado que no deja indiferente a ningún invitado.
